PÁGINA PRIMATOLÓGICA

Alouatta coibensis Thomas, 1902

Coiba Island howling monkey, Mono aullador de Coiba y Azuero, Panama.

Froehlich y Froehlich (1987) concluyeron que los aulladores en la isla de Coiba y la península de Azuero (trabeata) están cerca, pero muy distintos de A. palliata en Panamá, Costa Rica y Nicaragua. Su argumento se basó en un análisis de datos de huellas digitales, que utilizaron como sustituto para indicar la distancia genética. Citando a Bartlett y Barghoorn (1973), Froehlich y Froehlich (1987) indicaron que las islas de Coiba y Jicarón se conectaron por última vez al continente hace unos 24,000 a 15,000 años, y argumentaron que A. coibensis debería considerarse una especie distinta, con dos subespecies. —coibensis y trabeata. A. coibensis coibensis es más pequeño y tiene un color menos distintivo (más opaco) que la trabeata.

Cortés-Ortiz et al. (2003) encontraron, sin embargo, que tanto trabeata como coibensis compartían haplotipos de ADNmt con A. palliata y no podían justificar la clasificación de coibensis (o trabeata) como una especie distinta. La divergencia del ADN mitocondrial entre A. palliata y A. coibensis fue muy baja, mostrando solo un 0.1% de divergencia de secuencia, más de un orden de magnitud menos sustituciones de nucleótidos que las observadas entre cualquier otro par de especies de Alouatta. Se encontró que la divergencia entre A. palliata y A. coibensis es similar a las distancias de ADN mitocondrial observadas entre poblaciones geográficamente separadas dentro de cada una de estas dos especies. Esto, por supuesto, no significa en sí mismo que la especie A. coibensis deba desaparecer, pero sí sugiere que los caracteres morfológicos deberían reevaluarse por su consistencia. Un estudio morfométrico de Guadalupe Méndez indica que los monos aulladores de Azuero y Coiba están bien diferenciados de otras formas centroamericanas, y que ciertamente son subespecies distintas (A. Cuarón, in litt. 21 de mayo de 2003). Rylands y col. (2000) y Groves (2001) siguieron a Froehlich y Froehlich (1987) al reconocer a coibensis como una especie completa. Seguimos reconociendo tanto la trabeata como la coibensis como distintas, pero aceptamos plenamente la posibilidad de que se las considere subespecies de A. palliata.

Alouatta coibensis coibensis Thomas, 1902

Coiba Island howling monkey, mono aullador de Coiba, Panamá

Tipo: Un macho viejo (piel y cráneo, número de acceso 1902.3.5.9 en el Museo Británico (Historia Natural), recogido el 18 de mayo de 1901 por J. H. Batty (Napier, 1976).

Localidad tipo: Isla Coiba, costa del Pacífico de Panamá.

Este mono aullador sólo se conoce en la isla de Coiba y en la vecina Jicarón, frente a la costa del Pacífico de Panamá. Es más pequeño que otros monos aulladores centroamericanos, y tiene un pelaje más opaco que la forma estrechamente relacionada de la península de Azuero, A. c. trabeata En comparación con A. c. trabeata, el manto está más limitado a los flancos. Hill (1962) describió la cabeza y la parte delantera de la espalda como «sello marrón, que aparece casi negro en la mayoría de las luces». La espalda baja es más pálida y la grupa y las partes proximales de las extremidades posteriores son de color nogal. Los pelos del costado son alargados: naranja-rufo a canela-rufo, según Hill (1962), y dorado como lo describe Groves (2001). El espécimen tipo tiene un escroto pedunculado y sin pigmento grande (Hill, 1962). Las hembras son de color similar a los machos, pero más pequeñas.

Alouatta coibensis trabeata Lawrence, 1933

Azuero Howler Monkey, Mono aullador deAzuero, Golden Howling Monkey, Mono aullador dorado (Froehlich y Froehlich, 1987).

Tipo: macho adulto (piel y cráneo, número de acceso 29545) en el Museo de Zoología Comparada, Harvard, recogido por Thomas Barbour, en marzo de 1933.

Tipo de localidad: Capina, Provincia de Herrera, Panamá.

Según Hill (1962), este mono aullador se distingue principalmente por sus flancos y lomos dorados (puntas de oro-ocráceas en los pelos), junto con una apariencia más marrón del resto del cuerpo. Lawrence (1933) lo describió como teniendo una espalda de color nogal y pelos muy largos y sedosos en el flanco dorado que se extienden desde la axila hasta la ingle. Además de esto, observó un mayor grado de dimorfismo sexual en las mediciones del cráneo que en otras poblaciones de aulladores centroamericanos. Froehlich y Froehlich (1987) encontraron que estaba más estrechamente relacionado con la coibensis Thomas, 1902 que con otras formas centroamericanas y, al reconocer la coibensis como una especie completa, la ubicaron como una subespecie. Aunque lo enumeró como sinónimo de coibensis, Groves (2001, p. 180) reconoció que «las poblaciones continentales e insulares de esta especie [coibensis] difieren considerablemente y son presumiblemente (¿al menos?) Subespecíficamente distintas». Froehlich y Froehlich (1987 ) proporcionan una discusión interesante sobre la zoogeografía de la región y cómo y por qué la península de Azuero pudo haber estado relativamente aislada en el pasado, lo que resultó en la diferenciación de sus aulladores (y monos araña) y una fauna de mamíferos relativamente depauperada. Rylands et al. (2000) y Groves (2001) siguieron a Froehlich y Froehlich (1987) al reconocer a trabeata como una subespecie de coibensis. Es endémica de la península de Azuero, Panamá (Froehlich y Froehlich, 1987; Rowe, 2000).

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