Una estrategia clave en las gestiones de conservación de la naturaleza y la conservación de especies emblemáticas es la educación para crear una nueva cultura ambiental.
El conocimiento es poder. Cuando un ciudadano logra ser empático con una causa es cuando llega a conocer y asimilar los asuntos fundamentales de los argumentos técnicos, éticos, científicos, utilitarios o pragmáticos que usualmente se utilizan para crear conciencia colectiva.
Todo ser humano, joven o mayor, es capaz de ser parte activa en la defensa del patrimonio natural, por ello es fundamental saber llegar a cada audiencia y a cada individuo, ya que los mejores aliados de la conservación son y serán las personas que conviven con la naturaleza día a día.