El área está dominada por un clima húmedo tropical y un clima tropical de sabana con estación seca prolongada. En la clasificación de eco-regiones esta área puede ser parte de los bosques húmedos del Pacífico del Istmo de Panamá Costa Rica. La unidad de manglar es considerada la Costa Húmeda del Pacífico de América Central. Hay que tener en cuenta que la naturaleza del suelo también define la estructura vegetativa local a nivel de tierra firme.
Una reserva de vida
Los administradores de Isla San Pedro, decidieron ya hace más de una década legar las tierras de Isla San Pedro como un sitio de reserva de biodiversidad y hoy son parte de la Red de Reservas Privadas de Panamá.
El sitio ya no alberga ningún tipo de ganado, y el bosque se recupera muy rápido. Ya no se ve rastros evidentes de ganadería, salvo los sitios que fueron bebederos del ganado. Los De Obaldía han apostado porque esta zona se convierte en un lugar con mucha naturaleza original para el disfrute de la sociedad. La Isla tiene un extensión entre los bosques de manglar y tierra firme de casi 1000 hectáreas.
Poco a poco y más rápido se ha estado reverdeciendo. Las imágenes de satélite secuenciales dan evidencia de ello.
Ahora los monos han tomado el lugar de las vacas y caballos. Coros inmensos de monos aulladores agrupados en media docena de tropas le dan vida al bosque y lo hacen vibrar. La isla San Pedro evidentemente se ha convertido en el oasis de los monos. Ahora no hay parche de bosque con árboles siempre verdes de tierra firme que no tengan una tropa de ellos o muchos individuos a lo largo de los senderos del sitio protegido.
En el bosque de manglar y entre el bosque de tierra firme los listos monos carablancas se mueven sigilosos y a veces ruidosos. Ellos son los reyes del manglar. Este paisaje lo comparten con una especie símbolo de Chiriquí: Los monos ardilla o monos tití chiricanos (Saimiri) que son más dependientes del bosque de tierra firme para forrajear y encontrar su alimento preferido, los insectos.
Cuando la estación seca toma fuerza, la sobrevivencia de especies dependientes de agua dulce se vuelve más dura. Algunos puntos con agua se convierten en verdaderos oasis de vida.
Turismo sostenible
Además del turismo de playa en el sector oeste del RVS La Barqueta, la Isla San Pedro ofrece el mejor escenario para el turismo ecológico debido a la recuperación evidente del paisaje y la presencia de especies distintitivas del manglar y de los bosques de tierra firme que harían una experiencia especial para cualquier turista que visite la zona.
Desde Isla San Pedro se pueden tomar magníficas foto postales del ecosistema de manglar, de la cordillera central dominando y recordando que gran parte del agua que forma este gran estuario circundante es hijo del gran Volcán Barú. A este estuario llegan aguas del Río David, Río Chiriquí, Río Platanal y Río Chico.
En medio del manglar y en el ecotono con tierra firme se forma una alianza de vida cargada de muchas especies vegetales y animales que animan permanentemente los senderos, especialmente cuando la temperatura está amena.
El alto dosel del manglar dominado por el mangle negro, mangle caballero crean una carpa verde y una paisaje del sotobosque cargado de formas tan indescriptibles y hermosas que sólo la presencia misma del observador podría absorber tanta belleza que no lo puede describir ni una fotografía, ni un texto.
Legado y ejemplo
Los ecosistemas que custodia Isla San Pedro son parte del inventario especial de biodiversidad del occidente del país que contiene especies únicas especiales como es el caso del mono tití chiricano donde esta área se convierte en el extremo sureste de la distribución de la especie en el país.
Nadie puede ignorar la importancia estratégica que tiene Isla San Pedro en la custodia del último reducto de biodiversidad importante que le queda al distrito de Alanje en la Provincia de Chiriquí.
Un día no muy lejano, donde los testigos septuagenarios dan testimonio que gran parte de Alanje fue un territorio dominado por impresionantes bosques de tierras bajas, de los cuales casi no queda rastro de ellos por ningún lado. Los bosques de San Pedro son bosques secundarios en diferentes grados sucesionales y ya son un nuevo ejemplo de restauración de bosques y uso sostenible de la biodiversidad. El Estado debe garantizar, apoyar y financiar este tipo de iniciativas.
Proyecto Primates Panamá hace esfuerzos de colaboración con diversos actores claves que tienen interés y motivación por salvaguardar el patrimonio natural del país. El éxito de conservación que impulsa la buena fe y visión de los De Obaldía, también será un éxito para el país y el planeta. La biodiversidad es un patrimonio mundial y todos tenemos la obligación de protegerlo.
Datos del área
Nombre oficial del área protegida: Refugio de Vida Silvestre La Playa La Barqueta Agrícola
Área del artículo: Isla San Pedro dentro del RVS La Barqueta
Fecha de creación del área protegida: 2 de agosto de 1994
Área: ~1000 Ha
Área de manglares: 600 Ha
Especies
emblemáticas: Mangles, Virola surinamensis, Ficus,
mapaches, monos aulladores, monos carablanca, mono tití chiricano,
loros.
Autor: Ariel Rodríguez-Vargas,
Director General de Proyecto Primates Panamá