El Espavé y los posibles beneficios alimenticios para el mono aullador de Chorcha
Dra. Laura P. Patiño C.
Proyecto Primates Panamá
El espavé de nombre científico Anacardium excelsum, es un árbol perteneciente a la familia de las anacardiáceas (que incluyen el mango), se distribuye en la región Mesoamericana, desde Honduras hasta Ecuador. Este árbol puede alcanzar hasta los 40 metros de altura, por lo que se le conoce como uno de los gigantes de América Tropical. Tiene un tronco con la corteza exterior gris o negra y algo resinosa en el interior. Sus hojas son simples y alternas, de 10 a 35 cm de largo y de 4 a 12 cm de ancho. Generalmente su época de florecimiento y fructificación ocurre desde febrero a mayo, cuando se pueden observar las coloraciones verde-amarillentas en las partes altas de los árboles. Esta especie son comunes en las riberas de los ríos y quebradas.
Más allá del uso de su corteza como madera para ebanistería y su evaluación como especie fijadora de carbono, el espavé también es un reservorio de compuestos químicos, producidos por su propio metabolismo. Se han realizado diversos estudios acerca de la fitoquímica de este árbol, entre los que se pueden mencionar la investigación de Urrea y Sequeda en el año 2012, quienes evaluaron los extractos de esta especie como alternativa para la preservación de alimentos. Los investigadores obtuvieron extractos etanólicos de la corteza, las hojas, las flores y el fruto; y también identificaron ácidos grasos, como el ácido oleico y octadecanoico, con actividad antibacteriana.

Por otro lado, Salehi y colaboradores en el 2019 estudiaron la composición química de varias especies de las anacardiáceas, como el marañón (A. occidentale) y el espavé, donde encontraron entre los componentes químicos mayoritarios, derivados del ácido anacárdico y el ácido salicílico (precursor de la aspirina) en el aceite y la semilla de estas plantas. Este tipo de compuestos han sido señalados como marcadores quimio taxonómicos para este género, por lo que se infiere que dichos metabolitos secundarios, pertenecientes al grupo de compuestos fenólicos, pueden tener actividad antioxidante y antimicrobiana. Ya Schulz en el 2006 había estudiado este tipo de compuestos, indicando que los mismos podían ser sintetizados a partir del ciclo de los ácidos grasos y que dada su similitud estructural con la aspirina, podía plantearse que la ingesta de alimentos con alto contenido de estos compuestos podría brindar acciones quimiopreventivas.
De igual forma, en los extractos etanólicos de hojas y flores del espavé se han identificado compuestos volátiles de naturaleza terpénica, tales como el germacreno-D y el α-pineno, los cuales además de conferir aroma, se asocian con actividades antibactericida y anti repelente. También fueron detectados en las hojas y tallos metabolitos de la familia de los flavonoides, que son estructuras altamente diversas (chalconas, flavonas, flavononas, flavonoles, entre otras).
ESPAVÉ Y MONOS AULLADORES
Esta especie vegetal forma parte importante como fuente de alimentación de los monos aulladores, los cuales son animales folívoros y cuya dieta se basa en más de un 70% de ingesta de hojas, y el resto corresponde a flores, frutos y tallos. De entre la amplia variedad de especies vegetales que pueden existir en un ecosistema en particular, se ha encontrado que los aulladores son consumidores selectivos de ciertas plantas y partes de estas, lo cual nos ha hecho estudiar la composición química de los metabolitos secundarios de esas especies vegetales, con el fin de tratar de determinar los posibles beneficios para el primate y si esa mezcla de componentes infiere también en la patrones de uso de las especies consumidas por los monos aulladores.

—
Se ha realizado desde 2017 al 2020 observaciones en campo sobre la dieta del mono aullador, en diferentes zonas de la provincia de Chiriquí, y se ha observado que en los parches boscosos donde hay presencia del espavé, el mismo es consumido por los monos aulladores durante casi todo el año, variando solamente la parte de la planta ingerida. Por ejemplo, en la temporada seca (enero-abril), las flores y frutos constituyen la parte más consumida, y se pudo observar por los análisis fitoquímicos que los flavonoides y los compuestos fenólicos eran los metabolitos más abundantes; por otro lado, durante los meses de mayo a agosto se observó un mayor consumo de hojas nuevas y tallos, en cuyos extractos se ha detectado menos presencia de flavonoides y una abundancia moderada de compuestos fenólicos. Un dato no menos relevante, es que la presencia de alcaloides fue negativa o escasa tanto en los reportes de literatura antes mencionados como en nuestros análisis. Estas diferencias en la variabilidad química de las plantas resultan normales, teniendo en cuenta que la producción de dichos metabolitos se ve afectada directamente por las condiciones ambientales, foliares, fenológicas y de estacionalidad.
Los resultados obtenidos hasta ahora plantean la perspectiva de una mayor proporción de compuestos altamente oxigenados (fenoles, flavonoides y sus derivados) en las partes del espavé consumidas por los monos aulladores, lo cual les puede proveer de propiedades antioxidantes, así como efectos regeneradores positivos, con base en las actividades farmacológicas previamente asociadas a este tipo de compuestos.
Referencias
Salehi, B, et. al. 2019. Anacardium plants: Chemical, Nutritional Composition and Biotechnological Applications. Biomolecules. 9 (9), 465.
Schulz, DJ., Klinge, CM. 2006. Integrative Plant Biochemistry. In Recent Advances in Phytochemistry. Editorial Elsevier. ISSN 0079-9920.
Urrea-Victoria, V., Sequeda-Castañeda, LG. 2012. Evaluation of extracts of Anacardium excelsum (Anacardiaceae) as alternative to food preservation. Vitae 19 (Supl. 1), 394-396.
