Ariel Rodríguez Vargas
Director / Proyecto Primates Panamá
DÍA MUNDIAL DEL MEDIO AMBIENTE 2020
Ariel Rodríguez Vargas
Director / Proyecto Primates Panamá
El 5 de junio es el Día Mundial del Medio Ambiente 2020 y este año está dedicado a la BIODIVERSIDAD. El tema ha sido seleccionado, ya que han ocurrido eventos catastróficos ambientales recientes en varios continentes que han golpeado y siguen golpeando fuertemente la naturaleza y su riqueza biológica en el mundo. Por ejemplo: los descomunales incendios en los bosques de Australia y de la Amazonía en Sudamérica, la invasión de una plaga de langostas en África y Medio Oriente y la emergencia de un virus peligroso proveniente de la fauna silvestre sobreexplotada y comercializada, sin controles efectivos de ningún tipo.
Los bosques del mundo que son reservorios de la mayor diversidad biológica del planeta deben ser protegidos de la ganadería extensiva y descontrolada y de la masificación de los cultivos de soja, palma de aceite y otros cultivos extensivos. Por su parte los mares no pueden convertirse en sitios vacíos de biodiversidad, víctima de la sobreexplotación de sus valiosos recursos o victimas del calentamiento global. Debe haber un balance que proteja la biodiversidad desde el nivel ecosistémico hasta el genético.
Hoy más que nunca sabemos que existe una estrecha relación entre los humanos y la naturaleza que todavía muchos se empeñan en destruir de mil maneras. La naturaleza pareciera que está a merced de mercenarios de la vida que prolifera en el planeta y eso no lo podemos permitir las grandes mayorías que sabemos que todos dependemos de esta red de vida. Nadie está exento de actuar efectivamente a favor del medio ambiente!
Es por ello que el Día Mundial del Medio Ambiente está haciendo un llamado en firme a la acción global de los ciudadanos para proteger la biodiversidad. No hay otra, no hay excusas para no actuar, no hay mucho tiempo que perder para actuar como comunidad global.
Para actuar a favor de este pedido debemos revisar nuestro actuar diario y nuestro modelo de consumo y crecimiento como sociedad. Reflexionando las siguientes interrogantes podemos despertar nuestra ética y compromiso de existencia en el planeta:
¿Consumimos con responsabilidad?
¿Qué productos consumimos que devoran o que contaminan el planeta?
¿Qué productos fabricamos que envenenan el aire, el agua o el suelo?
¿Qué productos compramos de los cuales sabemos las graves consecuencias que causan al ambiente?
¿Están las autoridades locales, nacionales y globales auspiciando la educación ambiental colectiva?
¿Están las autoridades comprometidas con el cumplimiento de los Objetivos del Desarrollo Sostenible y forjar una nueva cultura ambiental robusta?
¿Están las autoridades auspiciando más espacios verdes urbanos, más áreas de conservación o más naturaleza protegida?
¿Están los educadores inspirando a los estudiantes a vivir en armonía con la Tierra?
¿Cuánto compromiso tiene cada educador en ese rol?
¿Tienen los educadores las competencias para enseñar el modelo de desarrollo sostenible y si no, qué debemos hacer para lograrlo?
¿Tienen las universidades el personal idóneo para formar profesionales en desarrollo sostenible?
¿Están las universidades preparando a los profesionales en conocimiento profundo sobre desarrollo sostenible y medio ambiente?
¿Existen los programas de educación continua para aprender de manera más profunda el tema de conservación de la naturaleza y calidad de vida, derechos humanos y derechos ambientales?
¿Cuánto compromiso tienen en ese rol los empresarios?
¿Cuánto compromiso tienen en ese rol las comunidades, los grupos organizados, los grupos profesionales?
¿Cuánto compromiso tiene cada uno de nosotros como humanos responsables en la protección del medio ambiente?
¿Cómo me organizo en familia y en comunidad para ser un agente de cambio a favor del planeta y la biodiversidad?
Que el Día Mundial del Medio Ambiente sea un día que sirva para hacer un fuerte llamado a todos, entre todos, por el medio ambiente y la salvaguarda de la biodiversidad del planeta.
A. Rodríguez Vargas
Sin compromiso ambiental, sin contratos de responsabilidad vamos al despeñadero ambiental legando a las próximas generaciones un planeta empobrecido, ambientalmente destruido y eso no es ético, ni justo, ni bueno. La sociedad actual y los tomadores de decisión deben tener visión y misión con objetivos claros y compromisos generacionales para la gente y el ambiente.
Que el 5 de junio – Día Mundial del Ambiente sirva para hacer un fuerte llamado a todos, entre todos, por el medio ambiente y que se entremezcle nuestra conciencia y la acción para la salvaguarda de la biodiversidad del planeta.
Un planeta para todos!